domingo, 14 de abril de 2013

Mitología Griega


La mitología griega es el conjunto de mitos y leyendas pertenecientes a los antiguos griegos que tratan de sus dioses y héroes, la naturaleza del mundo, los orígenes y el significado de sus propios cultos y prácticas rituales  Formaban parte de la Religión  Antigua de Grecia. Los investigadores modernos recurren a los mitos y los estudian en un intento por arrojar luz sobre las instituciones religiosas y políticas de la antigua Grecia y su civilización, así como para entender mejor la naturaleza de la propia creación de los mitos. Existen 12 dioses del olimpo.

Estos se ordenan respectivamente:


zeus

En la Mitología Griega Zeus es el «padre de los dioses y los hombres», que gobernaba a los Dioses del Monte Olimpo como un padre a una familia, de forma que incluso los que no eran sus hijos naturales se dirigían a él como tal. Era el Rey de los Dioses que supervisaba el universo. Era el Dios del Cielo y el Trueno. Sus atributos incluyen el Rayo, el Águila, el Toro y el Roble. Además de su herencia indoeuropea, el clásico Zeus «recolector de nubes» también obtuvo ciertos rasgos conográficos de culturas del Antiguo Oriente Próximo, como el Cetro. Zeus fue frecuentemente representado por los artistas griegos en dos poses: de pie, avanzando con un rayo levantado en su mano derecha, y sentado majestuosamente. 

Atenea 



 Atenea, también conocida como palas Atena es la diosa de la guerracivilizaciónsabiduríaestrategia, de las artes, de la justicia y de la habilidad. Una de las principales divinidades del panteón griego y una de los doce dioses olímpicos, Atenea recibió culto en toda la Grecia Antigua y en toda su área de influencia, desde las colonias griegas de Asia Menor hasta las de la Península Ibérica y el norte de África. Su presencia es atestiguada hasta en las proximidades de la India. Por ello su culto tomó muchas formas e incluso tuvo una extensión considerable hasta el punto de que su figura fue sincretizada con otras divinidades en las regiones aledañas al Mediterráneo.
La versión más tradicional de su mito la representa como hija parentogeticamente de zeus, nacida de su frente completamente armada después de que se tragase a su madre. Jamás se casó o tuvo amantes, manteniendo una virginidad perpetua. Era imbatible en la guerra, ni el mismo Ares pudo derrotarla. Fue patrona de varias ciudades pero se volvió más conocida como protectora de Atenas y de toda la Ática.

Poseidon 

Poseidón es el dios del mar, las tormentas y, como «Agitador de la Tierra», de los terremotos en la mitología griega. El nombre del dios marino etrusco Nethuns fue adoptado en latín para Neptuno (Neptunus) en la mitología romana, siendo ambos dioses del mar análogos a Poseidón.  Poseidón fue venerado en Pilos y Tebas en la Grecia micénica de finales de la Edad del Bronce, pero fue integrado en el panteón olímpico posterior como hermano de Zeus y Hades. Poseidón tuvo muchos hijos y fue protector de muchas ciudades helenas, aunque perdió el concurso por Atenas contra Atenea. Le fue dedicado un himno homérico.

Hades


En la mitología griega Hades  alude tanto al antiguo inframundo griego como al dios de éste. La palabra hacía referencia en Homero solo al dios; siendo elgenitivo  Haidou una elisión para designar ubicación: ‘[la casa/dominio] de Hades’. Finalmente también el nominativo llegó a designar la morada de los muertos.
Hades es el mayor hijo varón de Crono y Rea. Según el mito, él y sus hermanos Zeus y Poseidón derrotaron a los Titanes y reclamaron el gobierno del cosmos, adjudicándose el inframundo, el cielo y el mar, respectivamente; la tierra sólida, desde mucho antes provincia de Gea, estaba disponible para los tres al mismo tiempo.
Hades también era llamado Plouton (en griego antiguo Πλούτων, genitivo Πλούτωνος, ‘el rico’), nombre que los romanos latinizaron como Plutón. Los antiguos romanos asociaron a Hades/Plutón con sus propias deidades ctónicas, Dis Pater y Orco; el dios etrusco equivalente era Aita.
El término «hades» en la teología cristiana es paralelo al hebreo sheol  o ‘pozo de suciedad’ y alude a la morada de los muertos. El concepto cristiano de infierno se parece más al Tártaro griego, una parte profunda y sombría del Hades usada como mazmorra de tormento y sufrimiento.

Afrodita


Afrodita (en griego antiguo Ἀφροδίτη) es, en la mitología griega, la diosa del amor, la lujuria, la belleza, la sexualidad y la reproducción. Aunque a menudo se alude a ella en la cultura moderna como «la diosa del amor», es importante señalar que normalmente no era el amor en el sentido cristiano o romántico, sino específicamente Eros (atracción física o sexual). Su equivalente romana es la diosa Venus.

Hera


Hera  legítima esposa de Zeus y una de las tres hermanas de Zeus en el panteón olímpico de la mitología griega clásica. Además, ocupaba el cargo de Reina de los Dioses. Su equivalente en la mitología romana era Juno. Se le sacrificaban la vaca y más tarde el pavo real. Su madre era Rea y su padre Crono.
Se representa a Hera majestuosa y solemne, a menudo en el trono y coronada con el polos (una alta corona cilíndrica usada por varias de las Grandes Diosas), pudiendo llevar en su mano la granada, símbolo de la fértil sangre y la muerte, y sustituto de la cápsula narcótica de la amapola.
Hera fue conocida por su naturaleza celosa y vengativa, principalmente contra las amantes y la descendencia de Zeus, pero también contra los mortales con los que se cruzaba, como Pelias. Paris, quien la ofendió al elegir a Afrodita como la diosa más bella, se ganó así su odio.
Hermes




En la mitología griega Hermes (en griego antiguo Έρμῆς) es el dios olímpico mensajero, de las fronteras y los viajeros que las cruzan, de los pastores, de los oradores y el ingenio, y el comercio en general, de la astucia de los ladrones y los mentirosos. En la mitología romana era denominado como Mercurio. Hijo de Zeus y la pléyade Maya. El himno homérico a Hermes lo invoca como el «de multiforme ingenio (polytropos), de astutos pensamientos, ladrón, cuatrero de bueyes, jefe de los sueños, espía nocturno, guardián de las puertas, que muy pronto habría de hacer alarde de gloriosas hazañas ante los inmortales dioses.»

Demeter

Deméter o Demetra (en griego antiguo Δημήτηρ o Δημητρα, ‘diosa madre’ o quizás ‘madre distribuidora’, quizá del sustantivo indoeuropeo *dheghom *mater) es la diosa griega de la agricultura, nutricia pura de la tierra verde y joven, ciclo vivificador de la vida y la muerte, y protectora del matrimonio y la ley sagrada. Se la venera como la «portadora de las estaciones» en un himno homérico, un sutil signo de que era adorada mucho antes de la llegada de los olímpicos. El himno homérico a Deméter ha sido datado sobre el siglo VII a. C. Junto a su hija Perséfone eran los personajes centrales de los misterios eleusinos que también precedieron al panteón olímpico.
En la mitología romana se asociaba a Deméter con Ceres. Cuando se le dio a Deméter una genealogía, se dijo que era hija de los titanes hermanos Crono y Rea (ambos hijos de Gea y Urano), y por tanto hermana mayor de Zeus. A sus sacerdotisas se les daba el título de Melisas.
Es fácil confundir a Deméter con Gea, su abuela, y con Rea, su madre, o Cibeles. Los epítetos de la diosa revelan lo amplio de sus funciones en la vida griega. Deméter y Core (‘la doncella’) solían ser invocadas como to theo (‘las dos diosas’).  Es bastante probable que existiese una relación con los cultos a diosas de la Creta minoica

Estia



En la mitología griega, Hestia (en griego antiguo Ἑστία Hestía) es la diosa de la cocina, la arquitectura, el hogar, o más apropiadamente, del fuego que da calor y vida a los hogares. Su culto se asemejaba a la escita Tabiti, y su equivalente romana sería la diosa Vesta, aunque el culto romano a ésta difería bastante del de los griegos.
Era la primogénita de los titanes Crono y Rea, y la primera en ser devorada por su padre al nacer; por lo que cual, fue la última expulsada del cuerpo de su padre cuando Zeus le entregó el vomitivo. Tras la guerra contra los Titanes, Hestia fue cortejada por Poseidón y por Apolo, pero juró sobre la cabeza de Zeus que permanecería siempre virgen, a lo que el rey de los dioses correspondió cediéndole los lugares preeminentes de todas las casas y la primera víctima de todos los sacrificios públicos, por evitar con su negativa una primera disputa entre los dioses.

Dioniso

En la mitología clásica, Dioniso (en griego antiguo Διώνυσος Diônysos o Διόνυσος Dionysos) es el dios del vino, inspirador de la locura ritual y el éxtasis, y un personaje importante de la mitología griega. Aunque los orígenes geográficos de su culto son desconocidos, casi todas las tragedias le presentan como «extranjero».
Fue también conocido como Baco (en griego antiguo Βάκχος Bakkhos) y el frenesí que inducía, bakcheia. Es el dios patrón de laagricultura y el teatro. También es conocido como el ‘Libertador’ (Eleuterio), liberando a uno de su ser normal, mediante la locura, el éxtasis o el vino. La misión divina de Dioniso era mezclar la música del aulós y dar final al cuidado y la preocupación. Los investigadores han discutido la relación de Dioniso con el «culto de las almas» y su capacidad para presidir la comunicación entre los vivos y los muertos

Hefesto




En la mitología griega, Hefesto (en griego Ἥφαιστος Hêphaistos, quizá de φαίνω phainô, ‘brillar’) es el dios del fuego y la forja, así como de los herreros, los artesanos, los escultores, los metales y la metalurgia. Era adorado en todos los centros industriales y manufactureros de Grecia, especialmente en Atenas. Su equivalente aproximado en la mitología romana era Vulcano.
Hefesto era bastante feo, lisiado y cojo. Incluso se dice que, al nacer, Hera lo vio tan feo que lo tiró del Olimpo. Tanto es así, que caminaba con la ayuda de un palo y, en algunas vasijas pintadas, sus pies aparecen a veces del revés. En el arte, se le representa cojo, sudoroso, con la barba desaliñada y el pecho descubierto, inclinado sobre su yunque, a menudo trabajando en su fragua. La apariencia física de Hefesto indica arsenicosis, es decir, envenenamiento crónico por arsénico que provoca cojera y cáncer de piel. El arsénico se añadía al bronce para endurecerlo y la mayoría de los herreros de la Edad de Bronce habrían padecido esta enfermedad

Ares


En la mitología griega, Ares se considera el dios olímpico de la guerra, aunque es más bien la personificación de la fuerza bruta y laviolencia, así como del tumulto, confusión y horrores de las batallas, en contraposición a su hermanastra Atenea, que representa la meditación y sabiduría en los asuntos de la guerra y protege a los hombres y sus habitaciones de sus estragos. Los romanos lo identificaron con Marte, dios romano de la guerra y la agricultura (al que habían heredado de los etruscos), pero éste gozaba entre ellos de mucha mayor estima.
Se lo representa como hijo de Zeus y Hera, aunque existe una tradición posterior según la cual Hera lo concibió al tocar una determinada flor, en lo que parece ser una imitación de la leyenda sobre el nacimiento de Hefesto, y es recogida por Ovidio. También existe una leyenda similar sobre el nacimiento de Eris, diosa de la Discordia. Su lugar de nacimiento y auténtico hogar estaba situado lejos, entre los bárbaros y belicosos tracios, y a él huyó cuando fue descubierto acostándose con Afrodita

Apolo

Apolo es uno de los más importantes y polifacéticos dioses olímpicos de lamitología griega y romana.
El ideal del kurós (joven imberbe), Apolo ha sido reconocido variadamente como dios de la luz; la verdad y la profecía; el tiro con arco; la medicina y la curación; la música, la poesía y las artes; y más. Apolo es hijo de Zeus y Leto y hermano mellizo de la cazadora virgen Artemisa. Es conocido como «Apulu» en la mitología etrusca, influida por la griega. Apolo fue adorado en la antigua religión griega y en la romana, así como en el neohelenismo moderno.
Como patrón de Delfos era un dios oracular, la deidad profética del Oráculo de Delfos. La medicina y la curación estaban asociadas con él, ya fuera directamente o por mediación de su hijo Asclepio. También era visto como un dios que podía traer la enfermedad y la plaga mortal, además de tener el poder de curarla. Entre sus cargos custodios Apolo tenía dominio sobre los colonos y era el patrón defensor de rebaños y manadas. Como jefe de las Musas (Apolo Musageta) y director de su coro actuaba como dios patrón de la música y la poesía. Hermes creó la lira para él, y el instrumento se convirtió en un atributo común de Apolo. Los himnos cantados en su honor recibían el nombre de peanes

Artemisa

En la mitología griega, Artemisa o Ártemis (en griego antiguo Ἄρτεμις —nominativo— o Ἀρτέμιδος —genitivo—) fue una de las deidades más ampliamente veneradas y una de las más antiguas. Algunos investigadores creen que su nombre, y de hecho la propia diosa, era originalmente pregriega. Homero alude a ella como Artemis Agrotera, Potnia Theron, ‘Artemisa del terreno virgen, Señora de los Animales’. En el periodo clásico de la mitología griega, Artemisa fue descrita a menudo como la hija de Zeus y Leto, y la hermana melliza de Apolo. Fue la diosa helena de la caza, los animales salvajes, el terreno virgen, los nacimientos, la virginidad y las doncellas, que traía y aliviaba las enfermedades de las mujeres. A menudo se la representaba como una cazadora llevando un arco y flechas. El ciervo y el ciprés le estaban consagrados.
En época helenística posterior, asumió incluso el papel de Ilitía como ayudante de los partos y acabó siendo identificada con Selene, una titánide que era la diosa griega de la Luna (razón por la cual en ocasiones aparece representada con una luna creciente sobre la cabeza). También fue identificada con la diosa romana Diana con la etrusca Artume y con la griega o caria Hécate

En la mitología griega también muestran criaturas, una combinación de el hombre y diversas cosas, como por ejemplo: 

Ninfas





En la mitología griega, una ninfa (en griego antiguo νύμφα) es una deidad femenina menor de la naturaleza, típicamente asociada a un accidente geográfico por tener en un lugar concreto, a pesar de lo cual eran designadas por el título de olímpicas, convocadas a las reuniones de los dioses en el Olimpo y descritas como hijas de Zeus. Diferentes de los dioses, las ninfas suelen considerarse espíritus divinos que animan la naturaleza, y ser representadas en obras de arte como hermosas doncellas, desnudas o semidesnudas, que aman, cantan y bailan. Poetas posteriores las describen a veces con cabellos del color del mar. Se creía que moraban en la tierra: en arboledas, en las cimas de montañas, en ríos, arroyos, cañadas y grutas. Según el lugar que habiten, se les llama Agrónomos (ἀγρονόμοι), Orestíades (ὀρεστιάδες) y Náyades (νηϊάδες). Aunque nunca envejecen o mueren por enfermedad, y pueden engendrar de los dioses hijos completamente inmortales, ellas mismas no son necesariamente inmortales, pudiendo morir de distintas formas.
Homero las describe con más detalle presidiendo sobre los juegos, acompañando a Artemisa, bailando con ella, tejiendo en sus cuevas prendas púrpuras y vigilando amablemente el destino de los mortales. A lo largo de los mitos griegos actúan a menudo como ayudantes de otras deidades principales, como el profético Apolo, el juerguista dios del vino Dioniso y dioses rústicos como Pan y Hermes. Los hombres les ofrecían sacrificios en solitario o junto con otros dioses, como por ejemplo Hermes. Con frecuencia eran el objetivo de los sátiros.
El matrimonio simbólico de una ninfa y un patriarca, a menudo el epónimo de un pueblo, se repite sin fin en los mitos fundacionalesgriegos; su unión otorgaba autoridad al rey arcaico y su linaje.

Centauros


En la mitología griega, los centauros son una raza de seres con el torso y la cabeza de humano y el cuerpo de caballo. Las versiones femeninas reciben el nombre de centáurides.
Vivían en las montañas de Tesalia y se les consideraba hijos de Kentauros (el hijo de Ixión y Néfele) y algunas yeguas magnesias, o de Apolo y Hebe.
Los centauros son muy conocidos por la lucha que mantuvieron con los lápitas, provocada por su intento de raptar a Hipodamía el día de su boda con Pirítoo, rey de los lapitas y también hijo de Ixión. La riña entre estos primos es una metáfora del conflicto entre los bajos instintos y el comportamiento civilizado en la humanidad. Teseo, un héroe y fundador de ciudades que estaba presente, inclinó la balanza del lado del orden correcto de las cosas, y ayudó a Pirítoo. Los centauros huyeron.  Escenas de la batalla entre los lápitas y los centauros fueron esculpidas en bajorrelieves en el friso del Partenón, que estaba dedicado a la sabia Atenea.

Cerbero



En la mitología griega, 'Cerbero' (en griego Κέρβερος Kérberos, ‘demonio del pozo’), también conocido como Can Cerbero, era el perro de Hades, un monstruo de tres cabezas, con una serpiente en lugar de cola.
Cerbero guardaba la puerta del Hades (el inframundo griego) y aseguraba que los muertos no salieran y que los vivos no pudieran entrar. Era hijo de Equidna y Tifón, y hermano de Ortro. La existencia de un perro infernal en la entrada de los infiernos parece que ya estaba presente en la mitología indoeuropea original, pues aparece en los mitos de otros pueblos indoeuropeos, como es el caso del perro ensangrentado Garm en la mitología escandinava

Sátiros




Los sátiros (en griego Σάτυροι, Satyroi) son criaturas masculinas —las sátiras son una invención posterior de los poetas— que en la mitología griega acompañaban a Pan y Dioniso, vagando por bosques y montañas. En la mitología están a menudo relacionados con el apetito sexual, y los pintores de vasijas solían representarlos con erecciones perpetuas.

Grifos


El grifo (griego: γρυφος gryphospersa: شیردال‌ shirdal, ‘león-águila’) es una criatura mitológica, cuya parte superior es la de un águila gigante, con plumas doradas, afilado pico y poderosas garras. La parte inferior es la de un león, con pelaje amarillo, musculosas patas y rabo 
Algunos grifos se representan con orejas puntiagudas en la cabeza o plumas en la cola. De acuerdo a los mitos, es ocho veces más grande y fuerte que un león común y no es raro que se lleve a un jinete con su caballo, o a un par de bueyes, que entran en sus patas. Con sus garras se fabrican copas para beber, y con sus costillas arcos para tirar flechas.

Hipogrifo



Un hipogrifo es una criatura imaginaria híbrida, de apariencia mitad caballo y mitad águila, que se asemeja a un caballo alado con la cabeza y los miembros anteriores de un águila. Su figura quizás provenga del bestiario fabuloso de los persas y de su simurgh, a través del grifo.
Su origen es evocado por el poeta latino Virgilio en sus Eglogas. Si alguna vez fue representado en la Edad Antigua y bajo los merovingios, es claramente nombrado y definido por primera vez en la obra de Ludovico Ariosto, el Orlando furioso, a inicios del siglo XVI. En este poema épico de caballería, inscrito en la continuidad del ciclo carolingio, el hipogrifo es una montura nacida naturalmente del apareamiento de una yegua y de un grifo, extremadamente rápido y capaz de volar alrededor del mundo, montado por magos y por nobles héroes, como el paladín Roger que liberó a la bella Angélica sobre su lomo. Símbolo de impulsos incontrolados, el hipogrifo llevó a Alstophe hasta la luna. El éxito de este poema permite que la figura y el nombre del hipogrifo sean retomados en otras historias del mismo tipo.

Hidra

En la mitología griega, la Hidra de Lerna (en griego antiguo Λερναία Ὕδρα) era un antiguo y despiadado monstruo acuático ctónico con forma de serpiente policéfala (cuyo número de cabezas va desde tres, cinco o nueve hasta cien, e incluso diez mil según la fuente) y aliento venenoso a la que Heracles mató en el segundo de sus doce trabajos. La Hidra poseía la virtud de regenerar dos cabezas por cada una que perdía o le era amputada, y su guarida era el lago de Lerna en el golfo de la Argólida (cerca de Nauplia), si bien los arqueólogos han confirmado que este lugar sagrado es anterior incluso a la ciudad micénica de Argos, pues Lerna fue el lugar del mito de las Danaides. Bajo sus aguas había una entrada al Inframundo que la Hidra guardaba.
La Hidra era hija de Tifón y Equidna y en algunas tradiciones fue madre de Quimera. Fue criada por Hera bajo un plátano cerca de la fuente Amimone en Lerna. Se decía que era hermana del león de Nemea y que por ello buscaba venganza por la muerte de éste a manos de Heracles. Por esto se decía que había sido elegida como trabajo para Heracles, de forma que éste muriese.

El león de Nemea 


En la mitología griega el león de Nemea (en griego Λέων της Νεμέας léōn tēs Neméas; en latín Leonem Nemeum) era un despiadado monstruo que vivía en Nemea. Finalmente fue vencido por Heracles. Suele considerársele hijo de Tifón y Equidna o de Ortos yQuimera, aunque también se ha dicho que habría caído desde la luna, como hijo de Zeus y Selene 
El león había estado aterrorizando los alrededores de Nemea, y tenía una piel tan gruesa que Resultaba impenetrable a las armas. Cuando Heracles se dirigía a cazar al león se hospedó en casa de Molorco, partiendo después hacia la guarida de la fiera.

Minotauro


El Minotauro (del griego Μινόταυρος, Minótauros), era un monstruo con cuerpo de hombre y cabeza de toro. El mito tiene su versión más completa en la Biblioteca mitológica de Apolodoro. Su nombre significa "Toro de Minos", y era hijo de Pasífae y el Toro de Creta. Fue encerrado en un laberinto diseñado por el artesano Dédalo, hecho expresamente para retenerlo, ubicado probablemente en la ciudad de Cnosos en la isla de Creta. Por muchos años, hombres y mujeres eran llevados al laberinto como sacrificio para ser el alimento de la bestia hasta que la vida de ésta terminó a manos del héroe Teseo.

Medusa

En la mitología griegaMedusa (en griego antiguo Μέδουσα Médousa, ‘guardiana’, ‘protectora’) era un monstruo ctónico femenino, que convertía en piedra a aquellos que la miraban fijamente a los ojos. Fue decapitada por Perseo, quien después usó su cabeza como arma hasta que se la dio a la diosa Atenea para que la pusiera en su escudo, la égida. Desde la antigüedad clásica, la imagen de la cabeza de Medusa aparece representada en el artilugio que aleja el mal conocido como Gorgoneion.


Mitos & Leyendas de la mitología Griega 


La caja de pandora


Por orden de Zeus padre de los dioses, Hefesto dios del fuego, famoso por sus habilidades, formó la estatua de una hermosa doncella. La propia Atenea que, celosa de Prometeo, habíase trocado en su enemiga, echó sobre la imagen una vestidura blanca y reluciente, aplicóle sobre el rostro un velo que la virgen mantenía separado con las manos, coronóla de frescas flores y le ciñó el talle con un cinturón de oro, adornada maravillosamente con policromas figuras de animales. Hermes, el mensajero de los dioses, otorgaría el habla a la bella imagen, y Afrodita le daría todo su encanto amoroso. 

De este modo Zeus, bajo la apariencia de un bien, había creado un engañoso mal, al que llamó Pandora, es decir, la omnidotada; pues cada uno de los Inmortales había entregado a la doncella algún nefasto obsequio para los hombres. 

Condujo entonces a la virgen a la Tierra, donde los mortales vagaban mezclados con los dioses, y unos y otros se pasmarón ante la figura incomparable. Pero ella se dirigió hacia Epimeteo, el ingenuo hermano de Prometeo, llevándole una caja regalo de Zeus. En vano aquél había advertido a su hermano que nunca aceptase un obsequio venido del olímpico Zeus, para no ocasionar con ello un daño a los hombres; debía de rechazarlo inmediatamente. 

Epimeteo, olvidándose de aquellas palabras, acogió gozoso a la hermosa doncella y no se dió cuenta del mal hasta que ya lo tuvo. Pues hasta entonces las familias de los hombres, aconsejadas por su hermano, habían vivido libres del mal, no sujetos a un trabajo gravoso, y exentos de la torturante enfermedad. Pero la mujer llevaba en las manos su regalo, una gran caja provista de una tapadera. Apenas llegada junto a Epimeteo abrió la tapa y en seguida volarón del recipiente innumerables males que se desparramarón por la Tierra con la velocidad del rayo. Oculto en el fondo de la caja había un único bien: la esperanza; pero, siguiendo el consejo del Padre de los dioses, Pandora dejó caer la cubierta antes de que aquella pudiera echar a volar, encerrándola para siempre en el arca. 

Entretanto la desgracia llenaba, bajo todas las formas, tierra, mar y aire. Las enfermedades se deslizaban día y noche por entre los humanos, solapadas y silenciosas pues Zeus no les había dado la voz. Un tropel de fiebres sitiaba la Tierra, y la muerte, antes remisa en sorprender a los hombres, precipitó su paso. 

La vejez, la enfermedad, la fatiga, la locura, el vicio, la pasión, la plaga, la tristeza, la pobreza, el crimen; todos los males del mundo se habían extendido por la tierra y sólo la esperanza quedó oculta en el fondo del arca.

Perséfone


Perséfone es hija de Zeus y Deméter (hija de Cronos y Rea, hermana de Zeus, y diosa de la fertilidad y el trigo). Su tío Hades (hermano de Zeus y dios de los Infiernos), se enamoró de ella y un día la raptó.
La joven se encontraba recogiendo flores en compañía de sus amigas las ninfas y hermanas de padre, Atenea y Artemisa, y en el momento en que va a tomar un lirio, (según otras versiones un narciso), la tierra se abre y por la grieta Hades la toma y se la lleva.
De esta manera, Perséfone se convirtió en la diosa de los Infiernos. Aparentemente, el rapto se realizó con la cómplice ayuda de Zeus, pero en la ausencia de Deméter, por lo que ésta inició unos largos y tristes viajes en busca de su adorada hija, durante los cuales la tierra se volvió estéril.
Al tiempo, Zeus se arrepintió y ordenó a Hades que devolviera a Perséfone, pero esto ya no era posible pues la muchacha había comido un grano de granada, mientras estuvo en el Infierno, no se sabe si por voluntad propia o tentada por Hades. El problema era que un bocado de cualquier producto del Tártaro implicaba quedar encadenado a él para siempre.
Para suavizar la situación, Zeus dispuso que Perséfone pasara parte del año en los confines de la Tierra, junto a Hades, y la otra parte sobre la tierra con su madre, mientras Deméter prometiera cumplir su función germinadora y volviera al Olimpo.
Perséfone es conocida como Proserpina por los latinos.
La leyenda cuenta que el origen de la Primavera radica precisamente en este rapto, pues cuando Perséfone es llevada a los Infiernos, las flores se entristecieron y murieron, pero cuando regresa, las flores renacen por la alegría que les causa el retorno de la joven. Como la presencia de Perséfone en la tierra se vuelve cíclica, así el nacimiento de las flores también lo hace.
Por otra parte, durante el tiempo en que Perséfone se mantiene alejada de su madre, Deméter y confinada a el Tártaro, o mundo subterráneo, como la esposa de Hades, la tierra se vuelve estéril y sobreviene la triste estación del Invierno.

Quirón


Quirón fue un excepcional centauro, criatura con cabeza y torso de hombre y cuerpo de caballo. Era dis­tinto al resto de su especie y descendía de Ixión, ya que él era hijo de Cronos y Philera (Filera). Su aspecto de centauro se debía a que Cronos había hecho el amor con la ninfa Philyra (Filira) mientras mantenía forma de caballo, para no levantar las sospechas de su esposa Rhea (Rea).
Mientras que el resto de centauros eran bestias muy rudas, el inmortal Quirón se distinguía por su carácter civilizado lleno de sabiduría, inteligencia y fraternidad. Era un gran músico y fue famoso por su extenso conocimiento en el campo de la medicina. Los héroes de la Ilíada no dejaban de alabar las pócimas de hierbas con que trataba las heridas do guerra. Apolo, amigo personal de Quirón, le encomendó la educación de su hijo Asclepio, dios de la medicina, lo que el centauro consideró un gran honor pero no el único, pues también se encargó de la ins­trucción de Jasón, Acteón y Aquiles, entre otros, debido a su enorme paciencia. Gracias a Apolo, Quirón se convirtió en un extraordinario arquero.
Quirón vivió en una cueva del monte Pe-lión en Tesalea. Estuvo casado con Chanclo y tuvo una hija. Su nieto, Peleo, recibió el apoyo de Quirón, entre otros, cuando quiso cortejar a la bella diosa del mar, Tetis, en una relación de la cual nacería el gran héroe Aquiles.
Por desgracia, el buen centauro tuvo un final cruel y doloroso, pues durante una visita de Heracles al centauro Folo se desencadenó una pelea con otros centauros sobre una crátera de vino, y Quirón fue asaeteado de forma accidental por el héroe. Los dolores que sufrió fueron tan severos que decidió regalarle su inmortalidad a Prometeo. Tras su muerte, Zeus decidió situarle en el firmamento como la constelación del Centauro.

Los Titanes


GENERACIÓN DE LOS TITANES


Urano y Gea adquieren preeminencia, de ellos nacen doce hijos, los Titanes y las Titánidas. Los Titanes son seis: Océano, el mayor, luego Ceo, Críos, Hiperión, Iapeto y, finalmente, Cronos (Saturno). Seis hermanas, las Titánidas: Tía, Rea (Cíbiles), Temis, Mnemosine, Febe y Tetis. Algunos de estos nombres responden a funciones particulares dentro del mundo, así, Temis, por ejemplo es la Justicia, Mnemosine es la memoria, quien garantiza la duración del mundo, no gracias al tiempo sino a la alternancia entre el día y la noche. Tetis es una divinidad marina; parece personificar la fecundidad femenina del Mar. Se casó con Océano, y le dio más de tres mil hijos (los ríos del mundo), su morada está situada lejos en el Oeste, en el país del Atardecer, todo rojo, que el Sol visita a diario al bajar del cielo. Hiperión (el que viaja a lo alto) casado con su hermana Tía, engendra a Helios y Selene (el Sol y la Luna). La mayor parte de los Titanes no existe más que en su descendencia: Ceo, unido a su hermana Febe (la Brillante), engendra a Leto, que más tarde será la madre de Artemisa y de Febo. Críos, con Euribia, una de las hijas de Gea y del Pontos, engendró a Astreo que fue uno de los esposos de la Aurora (Eos), al gigante Palas, y finalmente Perses, que fue el padre de la diosa Hécate -la señora de la noche-, diosa de la Abundancia, de la Elocuencia, pero también temible maga, hábil para metamorfosearse en perra, en loba, en asna, y cuya estatua de tres cabezas se erguía frecuentemente en las encrucijadas. Iapeto se casó con Climena, hija de Océano y de Tetis, que le dio cuatro hijos: Atlante (Atlas), el gigante que más tarde fue condenado a llevar sobre sus hombros la bóveda del cielo, Menoetio, quien también participó en la rebelión contra Zeus, y que por esa razón fue fulminado y sumergido en el Tártaro. El Titán cuya descendencia reviste mayor importancia es Cronos. A partir de él se desarrollan los destinos que llevan al poder a la generación divina de los Olímpicos. Los Cíclopes eran también hijos de Urano y Gea, tres genios de la tempestad: Arges (el fulgor del relámpago), Asteropes (las nubes de la tempestad) y Brontes (el estruendo del trueno), luego los Hecatonquiros (los Ciembrazos), tres gigantes: Coto, Briareo y Gies. Urano detestaba haber sido padre tan prolífico y por ello prohibía a sus hijos el ver la luz; les obligaba a permanecer encerrados en las profundidades de la Tierra. Ya que Urano imponía una continua fecundidad a su compañera, ésta planeó junto con sus hijos mayores, la venganza. Ninguno de ellos aceptó, excepto el más joven de ellos, Cronos, quien odiaba a su padre –no se sabe bien por qué-. Entonces Gea le confió una serpiente de acero muy dura y aguzada, y cuando una noche Urano se acercó a ella para fecundarla una vez más, Cronos que se encontraba expectante, le cortó con la serpiente los testículos a su padre y los lanzó al espacio. La sangre del dios herido cayó en forma de lluvia sobre la tierra y el mar, donde engendró aun otras divinidades. De esta sangre que cayó en la tierra salieron las Erinias –Eumenides-: Alecto, Tisífone y Megera, las tres Furias, genios crueles que viven en las profundidades del Infierno, donde torturan a los criminales, los Gigantes y una nueva generación de Ninfas, las Melíadas, o Ninfas de los fresnos. Titán Atlas De la sangre mezclada con semen, que cayó sobre el mar, nació la diosa Afrodita (Espuma). Amor y el hermoso Deseo, la cortejaron en cuanto nació.



LAS PRINCIPALES DIVINIDADES
Luego de cumplir su venganza, Cronos se quedó solo para reinar en el mundo que apenas se formaba. Alrededor de él se formaron nuevas generaciones. Noche engendró a la Suerte, Kere (el Destino) y Thánatos (el Fallecimiento); también engendró el Sueño y toda la raza de los Ensueños, así como a Momo, el dios del sarcasmo, y al Dolor, y a Némesis, que es la venganza de los dioses, y castiga en los hombres todo acto. Por su propia fecundidad, Noche engendró a las Hespérides, que son las Ninfas del Ocaso. Hay tres: Aegle, Eritia y Hesperaretusa: Habitan en el Extremo Occidente, en las orillas del Océano, no lejos de las islas Afortunadas, donde residen las Almas Felices. Diversos demonios crueles también son hijos de la Noche, Apaté (Engaño), Filotes (Ternura), Geras (Vejez), Eris (Discordia), que a su vez engendró otras calamidades: Olvido, Hambre, Los Dolores, los Combates, los Crímenes, las Querellas, los Discursos embusteros, Anarquía, Desastre, y Juramento (Horco). De esta manera el mundo se preparaba para recibir a los Hombres disponiéndoles mil causas de sufrimientos.


LOS DEMONIOS DEL MAR
Pontos (la Ola) tuvo como primogénito a Nereo, a quien se llama el Viejo del Mar, porque es leal y benigno a la vez, sin olvidar jamás la equidad. También Pontos engendró con Gea, a Taumas, que más tarde fue el padre de la diosa Iris, encarnación del arco iris y mensajera de los inmortales; luego a Forcis. Por su parte Nereo se unió con Doris, una de las hijas de Océano, que le dio las Nereidas, cuyo número varía según las tradiciones: más frecuentemente, se cuentan cincuenta, pero a veces son el doble. Entre las Nereidas sólo algunas han recibido una leyenda en particular: Tetis, la madre de Aquiles, y Anfitrite, la esposa del Olímpico Poseidón, dios del mar, y la siciliana Galatea. Las Nereidas jóvenes y bellas, pasan su tiempo eterno, hilando y cantando en el palacio de oro de su padre. Taumas hijo de Pontos, ha engendrado a la Arpías, Aelo y Ocipete (la borrasca y la vueladeprisa) a las que a veces se añade una tercera hermana, Cileno (la Oscura). Estas Arpías son genios malhechores, cuando caen sobre el mar, con toda la velocidad de sus alas, nada les aguanta: Lo arrancan todo a su paso. Se las representa semejantes a pájaros de presa, con garras agudas, y se asegura que viven en las islas Estrofadas, en el centro del mar Jónico. Las tres viejas del mar son: Las Greas (Enio, Pefredon y Dino: Viven en el Extremo Oriente, en un país cubierto de brumas, donde nunca sale el sol. Sólo tenían un ojo y un diente las tres, sirviéndose de ellos por turno). Las tres Greas eran hermanas de otros tres monstruos, las Gorgonas, llamadas Esteno, Euríala y Medusa. Medusa era la única mortal entre las tres. Las gorgonas eran horribles, estaban armadas con grandes defensas semejantes a las de los jabalíes: Sus ojos chispeaban y su mirada era capaz de convertir en piedra a quien tuviera la osadía de mirarlas fijamente. Su cabellera era hecha de serpientes, y alas de oro les permitían volar, vivían en los confines del mundo. Perseo da muerte a Medusa quien había sido fecundada por Poseidón. De su cuerpo al morir, surgen dos seres: Pegaso, el caballo alado, y Crisaor, el héroe de la espada de oro, que a su vez, engendró al gigante Gerión el de los tres cuerpos, víctima de Heracles y también a Equidna (la Víbora), un monstruo aterrador que se unió a Tifón y le dio hijos: El monstruo perro Ortros, compañero de Gerión, Cerbero, el perro que guardaba los Infiernos, la Hidra de Lerna, que había de ser muerta por Heracles, y la Quimera, a la que más tarde combatiría Belerofonte.

PRIMERA GENERACIÓN
En unión con su hermano la Titánida Rea, Cronos tuvo tres hijas: Hestia, Deméter y Hera, y tres hijos: Hades, Poseidón y, finalmente, Zeus, el último. Una maldición pesada sobre Cronos, luego de destronar a su padre, había rehusado dar satisfacción a Gea. Por no haber liberado a sus hermanos, condenados a no ver la luz. Gea le prometió que también él sufriría la suerte que había infligido a su padre, y que sería destronado por sus hijos. Para prevenirse contra esa amenaza. Cronos devoraba los hijos que le daba Rea. Los primeros cinco, se los comió. Pero cuando estuvo a punto de nacer el pequeño Zeus, Rea decidió salvar a ese niño. Con la complicidad de Gea, encontró un asilo en una caverna de Creta, donde dio a luz. Luego tomó una piedra y la envolvió en pañales, llevándosela a Cronos y diciéndole que era su hijo. Sin enterarse de la verdad, Cronos, tomó la piedra y se la comió. Zeus se había salvado al mismo tiempo que Cronos estaba condenado. Zeus creció en el antro de Creta, confiado a la custodia de una nodriza, la ninfa Almatea, y de jóvenes guerreros armados de lanza y escudo, los Curetas. Los Curetas (los jóvenes) danzaban sin descando una danza guerrera en torno a la gruta donde reposaba el niño: hacían el mayor ruido posible, entrechocando las armas y lanzando gritos de guerra. Todo ello con el fin de cubrir el llanto de Zeus, impidiendo que Cronos lo descubriera y se apresurase a devorarlo. Protegido, Zeus creció y adquirió toda su fuerza divina. Llegó el momento en que había de cumplirse la promesa de Gea. Zeus tenía entonces por compañera a una hija de Océano, Metis (Perfidia), que le dio una droga gracias a la cual Zeus pudo hacer vomitar a su padre los hijos que había devorado anteriormente. Todos volvieron a ver la luz. Con estos aliados, Zeus atacó a Cronos y a los Titanes, que fueron en auxilio de éste. La lucha duró diez años. Finalmente un oráculo de Gea prometió a Zeus la victoria si tomaba a los seres monstruosos precipitados antaño en el Tártaro por Cronos. Obedeciendo, y realizando así el voto de Gea, a la que Cronos había engañado, Zeus liberó a los monstruos, que se convirtieron en sus guardianes. Aquellos monstruos dieron a los jóvenes dioses poderosas armas que figurarían entre sus atributos futuros. Así es como los tres Cíclopes, forjaron para Zeus el trueno y el rayo, lo mismo que el relámpago: y Zeus será, eternamente, el dios del cielo tempestuoso. También dieron a Hades un casco que volvía invisible a quien lo llevara, por ello fue el dios del reino invisible, y reinaba sobre las almas de los difuntos. Poseidón recibió un tridente mágico, cuyo golpe es capaz de trastornar la tierra y el mar. Los Olímpicos se distribuyeron en el universo. Zeus obtuvo preeminencia, y reinó sobre el cielo, Hades se contentó con la parte del mundo situada debajo de la tierra, es decir, el mundo infernal. Poseidón fue el señor del mar.

SEGUNDA GENERACIÓN
Zeus tomó una esposa divina, Hesíodo le atribuye a Metis como primera compañera, Gea y Urano, depositarios de los secretos divinos, revelaron a Zeus un oráculo del Destino: De los hijos que nacieran de Metis y de él, el primero sería muy sabio y valiente, pero el segundo sería un hijo de ánimo violento llamado para destronar a su padre. Previniendo el peligro, Zeus se comió a Metis cuando ésta esperaba a su primer hijo. Zeus convocó al dios forjador, Hefestos, y le ordenó que le hendiera la cabeza de un hachazo. Y así es como, de la cabeza de Zeus, surgió una muchacha enteramente armada: era la diosa Atenea, toda sabiduría y valentía. Temis, la Titánida, fue la segunda esposa de Zeus, era ella la encarnación de la ley o la Equidad. De esa unión nacieron las divinidades que llaman las Horas, y que son las estaciones, Eran tres, Hesíodo, las llama: Eunomía, Diké e Irene, es decir, Disciplina, Justicia y Paz, pero los atenienses las conocían bajo los nombres de Thalo, Auxo y Carpo, que evocan los tres principales momentos de la vegetación: el nacimiento de la planta, su crecimiento y su fructificación. Zeus tuvo otras tres hijas con Temis, Moiras (las Parcas): Cloto, Laquesis y Átropos, que rigen el destino de todo ser humano. Aquel destino estaba simbolizado por un hilo, que la primera de las Parcas sacaba de su rueca, que la segunda enrollaba y que la tercera cortaba cuando llegaba al término de la vida que representaba. La tercera esposa de Zeus fue la Oceánida Eurinome, que le dio también tres hijas, Kharites (las gracias), Aglae, Eufrosine y Talía. Como las Horas, las Gracias son genios de la vegetación: Son ellas quienes transmiten la alegría en la Naturaleza y en el corazón de los hombres. Viven en el Olimpo en compañía de las Musas, presiden toda labor femenina. Deméter que era su hermana, dio a Zeus una hija, Perséfone. Luego se unió a la Titánida Mnemosine, y tuvo de ella nueve hijas, las Musas, "que se complacen en las fiestas y en la alegría del canto". Las Musas también patrocinan todas las actividades intelectuales, hasta las más altas, todo lo que libera al hombre de la materia y le da acceso a las verdades eternas. Elocuencia, persuasión, sabiduría, conocimiento del pasado y de las leyes del mundo, matemáticas, astronomía, poesía, música y la danza son su dominio. Las Musas eran: Calíope, Clío, Polimnia, Euterpe, Terpsícore, Erato, Melpómene, Talía y Urania.

MUSAS Y SU ESPECIALIZACIÓN
Calíope La poesía épica. Clío La historia. Polimnia la pantomima. Euterpe La flauta. Talía la comedia. Erato la lírica coral. Tepsícore la poesía ligera y la danza. Melpómene la tragedia. Uranía la astronomía. Después de Mnemosine, Zeus se unió con Leto, la hija del Titán Ceo y de la Titánida Febe. De ella tuvo dos hijos, Artemisa y Febo. Maia, hija del Titan Atlas, concibió al dios Hermes por obra de Zeus. Hera fue la última de las esposas divinas de Zeus, que le dio un hijo. Ares, el dios de la Guerra, y dos hijas: Hebe, personificación de la juventud (esposa de Heracles), e Ilitia, el genio femenino que protege los partos. Zeus amó también mortales, sobre todo a Alemena, que le dio a Hércules, y Semele, de la que tuvo a Dionisio, el dios del Vino. Hera, furiosa de verse así abandonada, hizo nacer por sí misma, sin la intervención de Zeus, a un hijo divino, Hefestos, que preside el trabajo de los herreros y de las artes del fuego. Se completa de esta manera, el grupo de las grandes divinidades. En la época clásica se considera que existen doce "Olímpicos": Zeus, Poseidón, Hefestos, Hermes, Ares, Febo, Hera, Atenea, Artemisa, Hestia, Afrodita y Deméter.


3 comentarios:

  1. muy bueno tu blog porque te informa sobre la mitologia y los dioses

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  2. mmm.... ami la verdad la mitologia griega se me hace muy interesante por que habla sobre los dioses y eso...y pues que tengo que decir... me gusta justin bieber ......... :D

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  3. bien... estubo muy bien, me gusto en especial las imagenes en la que estan representadas las deidades y los demas personajes de esta motologia

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